Victor A. Colotla's Celebration of Life

Palabras de la Dra. Izabela Schultz

Buenos días/tardes

Es un gran honor y un verdadero privilegio que me pidan que brinde mis comentarios acerca de mi querido colega el Dr. Víctor Colotla en su Celebración de la Vida. Mi nombre es Izabela Schultz. Conozco a Víctor desde hace treinta años.

Nos hemos convertido en compañeros de viaje en el complicado y a veces arcano mundo de la ciencia y la práctica de una disciplina que es una combinación psicología forense y rehabilitativa ... Este fue nuestro viaje ... Nos conocimos cuando llegué de Ontario para trabajar en el Departamento de Psicología de WorkSafeBC en diciembre de 1990 y más tarde me convertí en directora del departamento. Luego, cuando fui nombrada Profesora de Terapia Psicológíca en UBC, Víctor ofreció generosamente su experiencia a nuestros estudiantes graduados, enseñándoles evaluación y cursos de terapia supervisada. Finalmente, después de que se retiró de WorkSafeBC, Victor aceptó amablemente ser parte de nosotros como un psicólogo experto en el Cortex Center de Evaluación Anticipada, afiliado a UBC, y entonces pudimos trabajar juntos nuevamente.

Fué en esta última posición, como experto en el Cortex Center, que interactué por última vez con Víctor. Él se encontraba en la evaluación de un trabajador lesionado que estaba apelando su decisión y discutimos su caso. El trabajador presentó con retraso su petición de un informe y perdió su oportunidad permanentemente. El último informe de Víctor nunca se escribirá. Falleció unos días después de nuestra conversación, pero dejó su último expediente perfectamente organizado, como si estuviera preparado para que alguien más se hiciera cargo.

Conocer a Víctor durante tantos años fue un privilegio para mí. Fue un investigador, instructor y practicante sobresaliente, talentoso y dedicado, y un colega confiable y responsable. Su integridad personal y su asombrosa capacidad para elevarse por encima de las presiones institucionales e interpersonales en forma habitual, sabia, tranquila, calmada y diplomática fue muy apreciada por quienes entraron en contacto con él. Los estándares profesionales de Víctor y su compromiso con la verdad al trabajar con personas complicadas en contextos complicados fueron ejemplares. Fue un modelo a seguir tanto como científico como practicante "por excelencia". El fue un colega maravilloso y profesional profundamente afectuoso, humilde y modesto, y siempre dispuesto a ayudar.

Trabajando con Víctor a lo largo de los años, siempre se podía contar con él para que acudiera al rescate en diversas situaciones inesperadas y desafiantes. ¿Hay un proyecto de trabajo difícil pero importante que asumir y no hay voluntarios? Víctor lo aceptaría. ¿Existe un curso de posgrado crucial que de alguna manera no tiene un instructor que enseñara a seis semanas antes de que comiencen los cursos? Víctor aceptaría enseñar cuando se le pidiera que enseñara. ¿Hay un artículo enviado a una revista y la búsqueda de un revisor resulta inútil? Víctor revisará el artículo y proporcionará sus característicos comentarios analíticos, detallados y altamente constructivos que darán a los autores un camino muy claro para hacer que su artículo sea publicable y los alentará a continuar.

Nunca he visto a Victor triste, frustrado, cínico, enojado, quejándose o desanimado. Incluso cuando los nubarrones se acumulaban, siempre se mostraba positivo, tranquilo, sereno y compasivo. Y pensando en los demás. No estoy segura de cómo lo hizo. Su recuerdo, sus hechos y su legado vivirán.

Adiós, Víctor. Todos te extrañaremos ... Necesitamos de tu sabiduría y gran corazón en estos tiempos difíciles.

Gracias por tu ejemplo.